▪ De cara al 25 de julio, INFOCOOP felicita a las cooperativas de la región chorotega, que han sido fuente de trabajo, progreso y bienestar para toda la provincia.
Lucía Ramírez A.
Colaboraron Juan Carlos Céspedes y Alfredo Rojas.
El impacto del modelo cooperativo en tierras guanacastecas es palpable gracias a las 28 cooperativas existentes. Las hay dedicadas a la enseñanza, los textiles, la agricultura y los servicios. También operan en áreas poco comunes como la minería y la extracción de sal.
Los orígenes del cooperativismo guanacasteco se dan en 1961 con la Cooperativa de Caficultores de Cerro Azul (COOPECERROAZUL R.L.) ubicada en el cantón de Nandayure y la Cooperativa de Caficultores de Pilangosta (COOPEPILANGOSTA R.L.) en Hojancha. Ambas cooperativas fueron creadas con el objetivo de mejorar los precios de liquidación del café y las formas de pago al productor.
Desde entonces han sido promotoras de desarrollo en su área de influencia. En el caso de COOPEPILANGOSTA R.L, su gerente Wilbert Román comentó que iniciaron 25 asociados aportando un capital social de ¢ 8.000 y ahora han crecido hasta ser 167 asociados, con un capital social de ¢ 169.000.000.
Democratización de la economía
COOPEGUANACASTE R.L. y COONAPROSAL R.L. han destacado en la región por su éxito e impacto. La primera es una empresa líder en la distribución de energía eléctrica, que cuenta con 11 sucursales y agrupa a 40.800 asociados (codueños) en 4.800 kilómetros cuadrados de Santa Cruz, Carrillo, Nicoya, Hojancha, Nandayure, Guardia de Liberia y las comunidades peninsulares de Lepanto, Jicaral y Paquera.
COONAPROSAL R.L., por su parte, inició en 1974 con producción, industrialización y comercialización de sal, bajo la conocida marca nacional Sal Sol. Con el paso de los años ha crecido y ahora produce y comercializa camarones, mariscos, mango, piña, papaya, pulpas y frutas congeladas. Muchos de sus productos se están exportando, lo que demuestra los altos estándares de calidad utilizados.
También existen cooperativas que rescatan lo más profundo de la cultura pampera como COOPEGUATIL R.L., conformada por artesanos que moldean el barro para convertirlo en artesanía chorotega y COOPETORTILLA R.L., una cooperativa autogestionaria conformada por jefas de hogar, que cocinan a la leña los más deliciosos platillos típicos de la zona.
Incluso una de las fundadoras de COOPETORTILLA R.L., Margarita Marchena, fue reconocida en el año 2005 con el Premio Nacional de Cultura Popular Tradicional, por el liderazgo y empeño puesto en llevar adelante el rescate de las comidas típicas desde el restaurante de la cooperativa en Santa Cruz.
Las cooperativas además de satisfacer las necesidades de sus asociados y brindarles beneficios para garantizar su bienestar, extienden su rango de acción a las comunidades, otorgándoles becas estudiantiles, reparando caminos y realizando proyectos de sostenibilidad ambiental, entre otros.
INFOCOOP fomenta el cooperativismo en la región
El Instituto Nacional de Fomento Cooperativo (INFOCOOP) tiene actualmente en su cartera de crédito a once cooperativas guanacastecas beneficiadas. Al corte del primer semestre de este año la institución ha entregado ¢ 1.248.200.000 solamente en Guanacaste a cooperativas del más diverso giro empresarial como por ejemplo ahorro y crédito, producción de sal, café, turismo y educación.
INFOCOOP también trabaja intensamente en la zona fomentando la creación de nuevas cooperativas y mediante sus programas de capacitación, asistencia técnica y supervisión.
Guanacaste en cifras:
La Cooperativa de productores de oro y servicios múltiples de Abangares (COOPEORO R.L.) se encarga de comercializar el oro para el beneficio de los productores artesanales asociados.